El abogado penalista Juan Manuel Fontana, continúa detenido por haberle exigido a un cliente una suma de dinero como parte de un supuesto soborno para que el fiscal de la UFI número 8 no se negara a darle la libertad a su asistido
El abogado penalista, Juan Manuel Fontana, fue detenido el pasado viernes 8 de septiembre. Se negó a declarar por consejo de sus defensores. Según surge de la investigación, que lleva delante la fiscal Betina Lacki, de la UFI número 2, el imputado recibió 500.000 pesos en efectivo, 700 dólares y un Peugeot 307 para el pago de esa coima. Además, otros 130.000 pesos para sus “honorarios”. Tras descubrir el engaño, el hombre que estaba denunció el hecho ante las autoridades y aportó audios que incriminan al letrado.
El 30 de junio de este año, el cliente de Fontana, quien se encontraba detenido en una causa por violencia de género, se enteró que su hermano contaba con un defensor particular. Ese mismo día, el letrado fue a verlo a la Comisaría donde se encontraba alojado y lo hizo firmar la designación. Le explicó que la causa era “jodida”, que era “algo grave” y que “le iba a costar bastante salir”. El detenido, llamó a su hermano y le pidió que le adelante la suma de 130 mil pesos. A la noche, Fontana cobró.
En los primeros días del mes de julio, momentos antes de una audiencia donde las partes iban a llegar a un acuerdo para un juicio abreviado, el abogado le dijo a su defendido “Tenemos que arreglar con el fiscal para que te largue hoy mismo”. Después le preguntó cuánta plata tenía para darle, a lo que le contestó que tenía quinientos mil pesos en efectivo y setecientos dólares. Ahí le dice que era poco y le manifestó: “Tenemos que tirar un auto a la cancha”. De esta manera, Fontana no solo se quedó con la plata de su cliente, sino también con un Peugeot 307 color gris plata, de su hermano, a quien le hizo firmar el 08.
El juez de Garantías, Agustín Crispo, titular del Garantías número 6, condenó al imputado a la pena de 1 año y 6 meses de prisión de ejecución condicional por el delito de “lesiones doblemente calificadas por darse en un contexto de violencia de género” y dispuso su inmediata libertad.
Momentos antes de que Crsipo le diera la excarcelación, el letrado habló con el hermano del detenido y según consta en la declaración, Fontana le habría dicho “le voy a tirar la plata al fiscal por la cara”
Después, ingresaron a la audiencia, en donde el detenido y Fontana firmaron la resolución y se retiraron. En el pasillo, el abogado le hizo mandar un audio desde su teléfono diciéndole que “habían arreglado con el fiscal y que le diera el dinero a su abogado”
Los audios:
En un audio identificado como 2023-06-15 at 6.26.10 PM (1), entre el detenido y Fontana, luego que este último recuperara su libertad, se escucha cómo tratan de acordar una reunión y ver el tema del precio del auto que se había entregado:
Cliente: "Bueno, menos mal, menos mal que le pegamos justo con este flaco (Fiscal), que pudimos arreglar con este (risa) sino".
Fontana: "No la verdad que tuvimos suerte, menos mal que justo la pegaste con este flaco (risa), tenés que pagarle el café después".
Cliente: "Si, si, si, digo, ahora te llamaba medio urgente viste, porque yo lo ... también estoy medio preocupado, que también mi hermano anda medio colgado, y yo quería ponerme al día viste, o sea, porque vos me habías dicho, o sea, el arreglo que habíamos hecho con este flaco, con el fiscal ahí (otro nombre que no se logra escuchar con exactitud) y yo"
Fontana: “Si"
Cliente: "Pero no sé si te dio eso mi hermano pero eran los setecientos dolares y los quinientos mil pesos, no?. Te había dado eso él?".
Fontana: "Eso me dio, tu hermano me dio quinientos y me quedo 700, ta".
Cliente: "Bien, setecientos dolares y el auto también entraba para ese flaco"
Fontana: "Exacto, el auto también, el auto, lo único que tengo es el 08, que el 08 es garantizar que se iba a hacer efectivo, falta".
Cliente: "bueno y, te digo, el precio que le pusieron porque yo tengo que pagarle el auto, viste, a mi hermano y no sé qué".
Fontana: "Mirá que no me dijo que vos le tenías que pagar el auto"
Cliente: "No, no, no pero viste, o sea yo soy un tipo digamos que le gusta hacer las cosas bien y no quiero".
Fontana: "Bueno, yo no sé el precio, fue, lo que se habló fue eso, ta, que era lo más rápido y lo que había en el momento, eh... Pasamos un precio y lo vemos, eso no se, yo no le puse un precio".
Fontana: "Si, ya está, ya está con eso ya está, lo único que te queda son mis honorarios que nos tenemos que sentar a hablarlo, que eso sería guita mía, pero con eso por lo menos, pero con eso".
Cliente: "Carlos también te había dado un adelanto de tus honorarios no? Me parece".
Fontana: "Treinta lucas me dio”.
Cliente: "Ah no te dio, porque él me dijo que te había dado ciento cincuenta supuestamente".
Fontana: "Ah, pará, pará, no medio treinta para mí y después me dio ehhh cien mil pesos más, tenés razón, ciento treinta me dio".
Con todas las evidencias, la fiscal Lacki, solicitó la detención de Fontana. En su requisitoria de detención, la fiscal indicó que “ desde el momento en que Fontana asumió como abogado de confianza se valió de distintos medios engañosos que condicionaron su voluntad -maniobra que extendió a sus familiares- induciéndolo para obtener un desprendimiento patrimonial, es decir, llevo a cabo una serie de reprobables artificios aprovechando claramente la situación en la que se encontraba su asistido -privado de su libertad-, acrecentado a la vez con un plus verbal la entidad del hecho que se le imputaba, con el claro objeto de roer su psiquis para el fraudulento fin propuesto”.
Digno discípulo del corrupto Ordoqui, responsable de la suerte del maestro Manuel Puig