Bajo el lema “13 años sin justicia-365 días sin Lucas” esta tarde se realizó una nueva marcha de antorchas, en dónde los presentes leyeron un documento en el cual exigieron la inmediata libertad y absolución del docente Lucas Manuel Puig quien hace un año fue condenado por el Tribunal Oral número 1 de La Plata por el supuesto abuso sexual de dos menores de edad en el Jardín de Infantes del Colegio San Benjamín de Los Hornos
A 365 días del oprobioso fallo dictado por los jueces Decastelli, Sanucci y Fernandez Lorenzo, miembros del TOC N° 1 de La Plata, la “Comisión por la libertad y absolución de Lucas Manuel Puig” y las “Familias autoconvocadas del Jardín San Benjamín” junto a la comunidad educativa, gremios y agrupaciones docentes locales y regionales, volvemos a marchar para repudiar la infamante condena y la desmesurada pena aplicadas al docente de música Lucas Manuel Puig, acusándolo de hechos que no cometió.
Que el maestro Lucas Manuel Puig esté condenado y preso es consecuencia de un proceso penal que, como sostiene la “Asociación de Pensamiento Penal”, se limitó a confirmar lo producido en una investigación arbitraria, parcial y prejuiciosa, y a condenarlo en base a indicios, valoraciones antojadizas y forzadas de la prueba, avalando conjeturas atravesadas por rumores y comentarios.
Las garantías constitucionales de Lucas fueron vulneradas una y otra vez. Se trata de un caso grave de violencia institucional. Inicia con la IPP a cargo de la Fiscal Bravo, quien no sólo otorgó un inadmisible peso probatorio a discursos de profesionales externos sin experticia ni potestad en el tema, sino también, al uso indebido de sus facultades tomando, por ejemplo, declaraciones a menores en su despacho. El contexto de producción de la información fue la construcción de un dispositivo siniestro, que fue tomado “per se” por los miembros del TOC N° 1 para así fundamentar su persecución descomedida y descontrolada, a partir de valoraciones probatorias arbitrarias y parciales, violando los principios éticos de imparcialidad, independencia e integridad.
Luego, en el juicio oral y público de 2022, se advierte claramente la invisibilización, sin argumentos razonables, de las evidencias que ofreció la defensa. La malintencionalidad manifiesta quedó expuesta ante la nula consideración probatoria respecto de los testimonios de docentes, auxiliares y directivos de la escuela. Y siguiendo la línea de nula consideración probatoria, nos encontramos con el vergonzoso menoscabo de los saberes de las profesionales del Cuerpo Técnico Auxiliar encargado de evaluar a los niños y de las también prestigiosas profesionales de la Dirección General de Asesoría Pericial, responsables de la evaluación del docente. Desestimar sus informes científicos no sólo constituyó una ofensa a sus trayectorias profesionales, sino un acto de avasallamiento al saber experto de las peritos de la Suprema Corte.
Y continuamos con la vulneración de la garantía del “plazo razonable”. Cabe recordar que este vergonzoso proceso que lleva 13 años y que fue iniciado por personas con estrechos vínculos con miembros del Departamento Judicial La Plata, ha transgredido la “prohibición de la doble persecución”. Como bien ha subrayado la Corte Suprema de Justicia de la Nación: “no es admisible volver a someter a un imputado a un nuevo juicio, cuando ya soportó uno y resultó absuelto”.
Sin embargo, en este injusto, vergonzoso e ignominioso proceso de “13 años sin justicia y 365 días sin Lucas”, aprendimos a construir comunidad a partir de consolidarnos en actores sociales para la acción colectiva. Acción colectiva ejemplar, porque a pesar de la desigualdad en la lucha no claudicamos en reclamar por la verdad. Defendemos a un Maestro de Música inocente. Somos concientes de que las persecuciones arbitrarias existen y que no se agotan en este caso. Pero también, que los derechos y garantías no pueden ni deben ser reductibles a mercancía. Apuntamos, en lo general, a una justicia proba e imparcial representada por funcionarios confiables y ecuánimes, capaces de romper con las ataduras inscriptas en las relaciones interpersonales de parentesco, amistad o clientelismo como si fueran naturales. En lo particular, buscamos la cordura que lleve a la objetiva revisión y evaluación de este deshonroso proceso, que salpica triste y dolorosamente a todo el sistema.
Convencidos de que la justicia existe y con la certeza de que haber escuchado a Lucas en audiencia pública, el 4 de mayo de 2023 no fue en vano, esperamos de los Sres. Jueces de la Sala V del Tribunal de Casación Penal, que refuten esta condena y esta pena maliciosas para que por fin sea justicia.
“Se sabe, se siente: Lucas, inocente”
Comisión por la libertad y absolución de Lucas Manuel Puig.
Familias autoconvocadas del jardín San Benjamín.
Comentários